Una de las técnicas más utilizadas en los últimos años es la aplicación del bótox. También conocida como toxina botulínica, para muchas personas resulta realmente algo indispensable en la cuestión de verse más joven y mejorar su piel. Sin embargo, una de las grandes preguntas es cuáles son los efectos del bótox y cómo éste puede perdurar en nuestra dermis.
Como siempre se indica en estos casos, todo depende de cada paciente. La realidad es que los efectos del bótox pueden durar una media de seis meses, aunque por supuesto hay algunos factores que podrían llegar a hacer que estos efectos se vean disminuidos y que las condiciones no sean tan duraderas. Dependiendo de todo ello, el efecto podría ser de cuatro a seis meses.
Algunos de los elementos que podrían llegar a variar esos efectos son por ejemplo si las arrugas que tiene la paciente son más o menos profundas, la potencia que se tiene en el músculo, la expresividad o no que se tenga con el rostro, entre otros.
Pero además de ellos, existen otros elementos que pueden hacer que los efectos del bótox se vean alterados:
Cuando realizas deporte de forma intensa, el esfuerzo físico hace que al contraer y relajar el rostro los efectos propios de la toxina botulínica desaparezcan con mayor rapidez.
Como toda sustancia, si la aplicas con mucha frecuencia, sus efectos van a ir desapareciendo y serán menos duraderos.
La utilización de elementos como el zinc hace que la durabilidad del bótox sea mayor y que se pueda alargar sus efectos, por lo que la ingesta diaria de este suplemento es ideal para ello.
Como puedes ver, los efectos del bótox dependen de muchos factores no sólo de la aplicación del mismo.
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